Identidad Rimense: Alentando y analizando al Sporting

Mientras desde la popular cantaba el “Vamos cerveceros, que esta noche tenemos que ganar” veía a un Sporting Cristal peligroso, presionando y siendo el protagonista del partido. 15 primeros minutos muy buenos, con chances de gol y no dejando jugar al rival. Hasta ahí parecía el partido que habíamos jugado en Arequipa la semana anterior. Pasó otro cuarto de hora donde el juego se hizo friccionado y un par de remates celestes levantaron a la hinchada. Luego Peñarol se acomodó, aunque sin mayor peligro hasta el gol: una jugada que se genera de un balón largo donde Murillo le gana a Revoredo dejando solo a Aguiar y este no perdonó (típico gol de equipo uruguayo). Todos pensamos en ese momento lo injusto que puede ser el futbol y la bendita frase de “goles que no haces…”

Así terminó el primer tiempo, mientras tanto, en la tribuna la gente comentaba que el partido estaba controlado, faltaba definirlo como en los últimos juegos de local por el Torneo Apertura. La falta de eficacia y contundencia de nuestros jugadores de ataque preocupaba, era un partido parecido al de la Copa Libertadores 2015 versus Táchira con la diferencia que esa vez lo empezamos ganado.

El segundo tiempo arrancó tal como al inicio del partido, Sporting Cristal insistiendo por las bandas con centros y remates de larga distancia. Se notaba el cansancio de Lobatón y la imprecisión de Silva por un lado; sin embargo, estuvieron las ganas y el corazón de Costa, las subidas constantes de Céspedes y el ida y vuelta de Calcaterra podían más. Había que refrescar el ataque y entró Ramúa, que no lo hizo nada mal, incluso de sus pies sacó el centro que nos daría el empate tras un cabezazo de Rodríguez. Era justo en ese momento, porque el rival tenía un libreto para nada superior al nuestro y por todas las situaciones que generamos mediante la propuesta.

Terminó el partido y lo cierto es que una vez más nos quedamos con el sinsabor de poder haberlo ganado, de haber sido superiores pero no eficaces. Partidos como los de ayer se tienen que ganar decía yo en mi mente, mientras salía del estadio con un mar de camisetas celestes, sin voz y cansado de tanto saltar.

A todos nos preocupa la falta de gol del equipo empezando el año, 4 partidos oficiales y solo 4 goles (2 de pelota parada). Estoy seguro que corrigiendo esto podemos pasar a octavos y ganar más en el Torneo Local, de lo contrario nos complicaremos. Cristal por historia es un equipo goleador, hay que demostrarlo y más en la Libertadores, torneo donde nos ve todo un continente.

Hay cosas positivas y así algunos no lo vean, estamos en el camino. Confió en el equipo y el comando técnico de Mariano Soso.

Mención aparte para el hincha que se hizo presente, 30 mil celestes en el estadio. Se vivió ambiente de Copa como ya estamos acostumbrados, esta vez los dirigentes acertaron con los precios. La Copa recién empieza, apoyemos hasta el final.