La Copa: 1997, a un gol de la gloria.

«La idea es ganar la final de la Copa Libertadores» – Francisco Lombardi, El Grafico 1996. Y casi se consigue. Luego de las excelentes campañas que veníamos realizando en este torneo, Cristal le tocaba afrontar su mejor participación en la Copa Libertadores.

2

Y todo empezaba en Lima, contra Alianza Lima con un amargo empate 0-0 y la expulsión de Manuel Marengo. Markarian, debuto con Cristal en Copa Libertadores un 19 de Febrero de 1997.  Cruzeiro era el segundo rival de este grupo -luego nos volveríamos a ver las caras- y acá se gesto el primer triunfo celeste. Triunfo celestial con gol de Julinho a los 63 minutos del partido. Gremio también se fue con el mismo resultado, venía de golear 0-4 a Alianza Lima y empezó que sería un rival fácil, al final se dio cuenta de realidades distintas.

Sporting Cristal en los partido de vuelta, recibió el gol más rápido que le marcan en Copa: César Rosales al minuto de juego frente Alianza Lima. Julinho – tantas veces- no tardaría en empatar el partido con gol a los 48 minutos. En Brasil nos fue mal, dos derrotas: Cruzeiro (2-1) y Gremio (2-0), pero nos alcanzaba para pasar de fase.

8

En los octavos de final nos tocó el Velez Sarfield de Chilavert. Luego del empate 0-0 en Lima, Cristal viajaba a Argentina afrontar el partido contra un rival duro. y lo jugó con brillante actitud, sí perdía quedaba eliminado, pero jugó a ganador y así en el minuto 178 (dos partidos) del partido, luego de una carrera increible, Jorge Soto pondría el 1-0 que nos metía a cuartos de final.

6
El rival era el Bolivar de Thomas N’Knono. En el estadio Jesús Bermudez el 21 de Mayo de 1997, Sporting Cristal adelantó el marcador luego de un buen gol de Luis Alberto Bonnet, pero el partido lo dio vuelta los Bolivianos con goles de Jiguchi y Joao. En Lima, la historia sería distinta. Una goleada con categoría que propinamos al equipo Boliviano con goles de Solano, Soto y el Ghanes Amoako que había tenido una destacada participación en los juegos olímpicos de 1996.

7

El 23 de Julio, nos toco con el futuro Rival del 2015: Racing Club. En un partido de ida, donde gracias a los goles de Bonnet y Soto los argentinos no pudieron alargar la diferencia, dieron la tranquilidad a la hinchada que en Lima podría dar vuelta a este resultado adverso. En lima fue el baile, la jarana y la fiesta. Un 4-1 al rival que venía con todas sus figuras como Capria, Galvan, Mac Allister, Cordoba y Villallonga.  Con los goles Bonnet (2), Rivera y Solano se encargaron de eliminar al equipo argentino y cumplíamos el sueño de jugar esa final que todo equipo anhela.
5
El 6 de agosto se disputo la primera final, con la falta de Amoako por expulsión tonta en el partido contra Racing, Markarian decidió poner a Carmona. El partido acabo en 0-0, donde pudimos ganarlo pero no se dio la oportunidad. Nos tocaba viajar a Belo Horizonte, quizá el partido más díficil en toda la historia de Sporting Cristal.

3La noche anterior de la segunda final, los presidentes de ambos clubes.

El 13 de Agosto se jugó la segunda final. La perdimos con un gol de Elivelton, que hace unos años declaraba que era el mejor de su carrera y que pateo con su pierna menos hábil. Pudimos ganarla sí, pero Julinho no pudo resolver bien en ese mano a mano con Dida. Quizá hubieramos podido cambiar un poco la historia del fútbol peruano, pero queda en la retina esta gran campaña que realizo el más copero, el más grande: Sporting Cristal.

1

3 thoughts on “La Copa: 1997, a un gol de la gloria.

  1. Esta Copa. La verdad que todas las historias que surgieron fueron más atractivas que la misma final, cuyos partidos fueron poco vistosos, muy de dientes apretados.
    Para empezar, recuerdo lo que escribió Jorge Barraza, periodista argentino que era director de la revista de la CSF. Él dijo: «Cristal era superior a Cruzeiro, pero le faltó convencerse de que era superior». Y fue verdad. Se respetó demasiado a Cruzeiro creo yo. Si Cristal salía más convencido en sus posibilidades éramos campeones.
    Recuerdo también una nota al paraguayo Nicolás Leoz, presidente de la CSF en donde él dice que se había preparado ya para darle la Copa a los peruanos por primera vez en su historia y que al final quedó un poco triste y desconcertado al tener que entregársela a Cruzeiro. Él también pensaba que Cristal era mucho más equipo. Balerio se jugó tremenda Copa, ganándose hasta escupitajos por defender a la gloriosa celeste. Primero fue Chilavert, luego de ir a increparle su soberbia. Valiente Balerio, ¿quién sino un tipo con huevos podría ir a meterse con un matón como Chilavert? Y luego fue Vidal González, un delantero argentino mañoso y experimentado que jugaba en Bolívar. Se armó un tumulto en el partido que jugamos en Lima, habían forcejeos y Balerio corrió desde el arco a meterse en la bronca y desahuevar a los bolivianos. Ahí apareció Vidal González para meterle un pollo a Balerio. Lástima que en la final te comiste el gol que menos podías comerte. Es la verdad Viejo, tú lo sabes. Pero bah, no se te reprocha nada. Lo diste todo por la celeste. Descansa en paz querido Viejo.
    Otra anécdota interesante es aquella entre Basile y Markarián en la previa al choque entre Racing y Cristal. Se cuenta que Basile había dado orden de inundar el camarín de Cristal a fin de incomodarnos y desconcentrarnos. Era un jugarreta típica de las viejas Libertadores. Pero Markarián era un tipo muy conectado y cuando se enteró de la pendejada, mandó a decirle a Basile que como pasara algo Cristal pediría ser local en el Cusco para el partido de vuelta. Basile arrugó y todo se desenvolvió normalmente. Sin embargo, en la previa del partido en Avellaneda hubo una especie de «homenaje» para Balerio y Asteggiano, dos ex-Racing que la verdad no habían tenido un buen paso por la Academia. Como resultado, lejos de ganarse aplausos se ganaron tremenda pifiada. Pero Balerio jamás arrugó y tuvo un duelo aparte con la hinchada de Racing durante todo el partido. Una más para tí, querido Viejo.
    Para el partido de vuelta contra Racing, se me viene a la mente la sospechosa actuación del árbitro, que nos expulsa al coyote Rivera y al ghanés Amoako. Recuerdo a Markarián gritándole a Amoako cuando se iba expulsado «Why? Amoako, why? jaja!! como el zambo solo hablaba inglés… Qué tal partido. Nunca ví un Cristal tan grande, tan fantástico. Mucha falta nos hicieron Rivera y Amoako para el partido de ida contra Cruzeiro.
    Quizás pocos sepan que hubo cierto distanciamiento entre Markarián y Julinho a raíz del gol fallado ante Dida en la definición en Belho Horizonte. Pucha, estaba solo Julinho, pero Dida era un tipo de más de dos metros de altura. No sé. En fin, la cosa es que Markarián siempre le reprochó a Julinho, incluso en público, por esa jugada. Sergio argumentaba que un delantero de real nivel habría metido ese gol. Julinho le respondió que él hizo la jugada correcta pero que Dida era un buen arquero y que la intuyó. No sé cómo estará la relación entre ellos hoy en día.
    Yo, la verdad, no recuerdo haber escuchado o leído que Lombardi tuviera como propósito ganar la Libertadores por aquella época. Pero bueno, al parecer por la cita de El Gráfico, había esa intención. Lo que sí sé es que para 1997, Cristal había perdido muchos jugadores artífices del tricampeonato como Palacios, Maestri, el mismo José Soto, Struway, Pinillos, entre los que recuerdo. Para esa Copa trajimos apenas a Carmona, Czornomaz (que se fue a México luego de la fase ante Vélez) y dábamos cabida a algunos jóvenes como Erick Torres, Miguel Rebosio, Martín Vásquez y Martín Hidalgo. Incluso el chico Abrahamson, que llegó a jugar algunos minutos en la final en Brasil pero luego desapareció del mapa. La mayoría cumplió mejor de lo esperado de la mano de un gran técnico como Markarián.
    Pero seamos sinceros. Cuando nos tocó el grupo con brasileños y Alianza Lima, siempre se tuvo en mente que al final íbamos a pelear el tercer lugar con Alianza para intentar pasar como mejores terceros. No creo que hubiera idea de ganar la Copa desde arranque. Hicimos bien nuestro trabajo como locales, ganando a los brasileños lo cual ya era bastante en ese momento. Se consiguió entonces pasar y venía Vélez, con casi todo su equipo campeón de la Copa de 1994. Nos menospreciaron pero Cristal mostró en esta Copa una actitud que podría ser el antecedente de lo que hoy queremos llamar RAZA. Creo que a partir de esa victoria en Argentina (la única en nuestra historia copera) el equipo comenzó a tener fe en sí mismo y empezó a trazar su camino a la final. Recuerdo que aquel gol de Soto nació de un rechazo de nuestra defensa que tomó Czornomaz quien con un pase a las espaldas de la defensa argentina habilitó al Camello que afortunadamente definió bien, con temple y seguridad. No se intimidó ante Chilavert, que lo había ninguneado días antes. Imposible olvidar al zambo Magallanes celebrando al final del partido gritando «¡jugando al fútbol!, ¡jugando al fútbol!». Jaja!! Grandes recuerdos.
    Aquel Cruzeiro había padecido una crisis a mitad de Copa y cambió de técnico, nombrando a nuestro conocido Paulo Autuori. Trajo un par de jugadores, entre ellos Wilson Gottardo a quien trajo de Fluminense para arreglar la defensa que era un desastre y el equipó se balanceó. Autuori siempre ha sabido agarrar equipos ya armados y retocarlos un poco. Nunca ha sido un técnico que sepa armar equipos desde cero y en eso le ganaba Markarián. Cristal era más pero nunca se sintió más, como decía Barraza.
    Este fue el once que arrancó en Belho Horizonte ante 106,000 personas, creo que la asistencia más grande para una final de Copa: Balerio, Soto, Marengo Asteggiano, Erick Torres; Garay, Solano, Rivera, Amoako; Julinho y Bonnet. Entraron luego Carmona por Amoako, Roger Serrano por Erick Torres e Ismael Abrahamson por Bonnet faltando cinco minutos. Este cambio nunca lo entendí, no recuerdo por qué sucedió. Marka a veces tenía esas cosas. Poner a un juvenil novato en lugar de tu goleador no parece muy acertado. En cinco o siete minutos podía pasar cualquier cosa.
    En fin, la historia ya está escrita, es hora de escribir una nueva con un mejor final .

    Me parece que no subieron al podio a recibir sus medallas de subcampeones ni Solano ni Balerio.

  2. Había olvidado comentar que estaba tan convencido Leoz de que ganaba Cristal que incluso invitó al presidente de la FPF, en ese entonces Nicolás Delfino, para la ceremonia de entrega de la Copa. En lo vídeos se ve que al final Delfino no tiene más opción que ayudar a Leoz a entregar las medallas a los brasileños.
    Fue un partido leal y se ve también cómo el público brasileño aplaude a Cristal por haber sido un digno y noble rival.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *