La Cancha: José Gálvez 1 – Sporting Cristal 0
Un gran amigo mio me dio la frase inicial de este post: “Fue un partido que invitaba a soñar”
¿Por el gran desempeño del equipo reserva celeste?
“No, porque de verdad, daba sueño”.
Y sí. Evité sucumbir a la tentación de ver la Copa América para poder seguir a este equipo cervecero y poder contarte un poco lo “poco” que vi. No me arrepiento, en realidad yo siempre voy a preferir ver a Cristal. Pero, seamos sinceros, el desempeño en el partido fue decepcionante.
Yo no soy de los que creen que a estos muchachos, categoría Sub 20 la mayoría, no hay que exigirles. En la vida como en el fútbol yo creo que siempre hay que exigirle más. Sobre todo en el fútbol donde un jugador se prepara para ser profesional desde chiquitín y a los 20 años ya debería tener claras muchas cosas. Las carencias del futbolista – así como las carencias de la institución que no lo supo desarrollar – no es excusa para pedirle menos. Y, vamos, en tres años estos muchachos deberían estar en la posibilidad de enfundarse la celeste del primer equipo y llevarnos a ganar las copas y campeonatos que todos reclamamos.
Futuro incierto, hoy por hoy.
En la cancha vi un equipo ligerísimo. Ligerito para atacar porque sus jugadas no sólo eran imprecisas sino que eran inofensivas, cándidas, inocentes. Y ligerito para defender porque constantemente quedaban en ficha, perdían posición, soltaban marcas.
Al frente estaba un José Gálvez que – con el trajín de su interés principal: el torneo de ascenso – no apretó mucho el acelerador. Es el chimbotano un equipo formado por jugadores ya cercanos al retiro y por algunos más que conocen varias temporadas en primera. Lo completan otros que conocen muy bien el duro arte de jugar segunda división en este país. Osea: equipo duro y complicado por donde lo mires. Es como pelearte con el pata que hace mudanzas: no será Mike Tyson ni Bruce Lee, puede estar falto de forma y todo lo que quieras, pero te puede sentar de un solo derechazo.
Pero, si me preguntas, hicimos negocio.
El partido terminó 1 a 0 para los chimbotanos gracias a un gol de cabeza en el que el delantero saltó poco y cabeceó fuerte rodeado de undotrecuat… SIETE (¡siete!) jugadores celestes.
Luego de eso, todo el segundo tiempo fue un vaiven de un partido aburridísimo en el que ya no se anotaron más goles. Como que Gálvez no le mete ganas a este Intermedio tampoco.
¿Porqué digo que fue negocio?
Por que, ya lo expliqué en el post anterior, la gran mayoría pensó que nos podíamos traer cuatro o cinco en la bolsa. Y tal vez hubiera pasado así si Gálvez le hubiera puesto ganas a este partido, quien sabe. Pero no fue así, traemos un 1 a 0 de visita y este miércoles 12 en el San Martín con un 2 a 0 pasamos. Si tienes en cuenta que ese partido lo van a jugar los “titulares” y que posiblemente Gálvez mantenga el mismo desinterés en esta Copa, parece que podemos pasar.
Pero, claro, ya sabemos que en estos tiempos Cristal es experto en complicarle los partidos a Cristal. No está de más un poco de precaución.
Y, eso es todo.
Un partido malo y un resultado no tan malo.