Los «Víctor Hugo» de bomberos.
Y así, con líos de pitos, se pasó la semana. El domingo jugamos contra Vallejo en Trujillo y la hinchada pide al equipo – que no a los árbitros – no jugar tan mal como la última vez que estuvimos por ahí.
Y para que no haya tanto revuelo, se tuvo el tino de programar a los mejores árbitros (en la tierra de ciegos … ) en los partidos que van a estar en la picota. Coincidencia, ambos árbitros se llaman Víctor Hugo. Rivera y Carrillo.
Así, mientras a Carrillo lo mandan a Matute, el arequipeño Rivera va con nosotros a Trujillo.
Y nada. Ojalá se venga una victoria cervecera.
¿La novela?
Bueno, les cuento la novela. En primer lugar, Oblitas salió a responder a Tejada y dijo algo así como: «como es viejito sabe que nadie le va a contestar y por eso habla» y se ratificó en sus comentarios sobre que la Conar esta mal y necesita otra dirigencia. Muy diplomático, Juan Carlos.
Y nada más.
¿Nada Más?
Bueno, si, algo más. Pero lo guardaremos para el siguiente post por que con éste cerramos el tema del regalo de Reátegui y, a no ser que pase algo especialmente importante, también el tema de Tejada y la Conar.