Crónica de un campeón anunciado.
Por: Alfredo Quichiz
No hubo que esperar hasta la última fecha para que todo caiga por su propio peso. La vida, se sabe, se encarga de poner a cada uno en su lugar. Y es por eso que, como dice la canción, “somos la fuerza ganadora, siempre campeones, siempre primeros”. Y siendo sinceros hubiera sido demasiado premio para nuestro más cercano perseguidor llevarse el título de Campeón del Torneo Apertura. Sobre todo considerando lo que muestra en el campo.
La realidad de nuestro equipo es otra y, de la mano del Comandante, vemos reflejada una mejora exponencial de muchos de nuestros jugadores y de nuestro juego en sí, siendo el equipo que mejor juega al fútbol en el torneo peruano en la actualidad. Y es por ello que para cerrar este Apertura con broche de oro, y aprovechando el lleno total del Alberto Gallardo (que debería llenarse fecha a fecha), debemos jugar contra Sport Rosario con las mismas ganas que siempre. Tal y como nuestro equipo nos tiene acostumbrados.
Pero que la ilusión nos dure únicamente hasta el domingo. Luego de ello es necesario volver a pisar tierra. No debemos olvidar que aún hay dos grandes objetivos por lograr: llevarnos el título de Campeón Nacional y sobre todo, ahora que nuevamente estamos invitados, hacer un buen papel en la Copa Libertadores. Estamos muy bien encaminados para llevarnos la estrella 19 este año, pero no será fácil. Muchos de nuestros rivales querrán tumbarnos e impedirlo, incluso la prensa nos hará renegar más de una vez, pero somos Sporting Cristal, señores. Y sabemos sobreponernos a las adversidades y que las excusas son solo para equipos mediocres.
De momento podemos seguir festejando, pero no perdamos de vista lo que queremos lograr. Nuestro equipo está para grandes cosas y esto solo debe ser el comienzo de todo lo bueno que está por venir. Sigamos apoyando al equipo y al trabajo de Salas, porque sin duda alguna, se lo merecen.
Nos vemos el Domingo para celebrar como se debe y con casa llena. ¡Fuerza, Campeón!