La Cancha: Sport Rosario 0 – Sporting Cristal 1
La disconformidad al final se explica más porque se terminó con angustia un partido que bien pudo haberse cerrado antes. La buena performance del equipo rimense no se tradujo en efectividad frente al arco y, salvo la que añadió Emanuel Herrera, Sporting Cristal perdió unas tres oportunidades claras que le hubieran dado mucha tranquilidad.
¿Fue bueno lo de Cristal?
Sí, lo fue. Y lo fue porque a pesar de algunas falencias defensivas y de definición, se volvió a mostrar una imagen de contundencia que había quedado mellada luego de la eliminación en Sudamericana y los dos empates consecutivos contra Universitario y UTC, rivales que por la tabla y lo brindado en jornadas anteriores, mostraban menor rendimiento que Cristal.
Pero queda aún la fragilidad defensiva. En Huaraz las mas claras en contra nos las generamos nosotros mismos. Omar Merlo ocasionó dos pelotas de autogol que no entraron por poco (una ligeramente desviada y la otra haciendo metal en el travesaño) en sendos centros enviados por el local. En el camino positivo, diremos que Patricio Álvarez hizo lo que su papel de arquero de equipo grande le exige: salvar las dos o tres que vienen directo a su arco. Encadenó tres atajadas excelentes que ojalá sirvan para que termine de coger confianza y se acomode con éxito en el arco rimense.
El siguiente rival es Alianza Lima. El campeón irá al Nacional a borrar la pobre impresión que dejó cuando le ganamos 0 a 2 en su cancha. No contaremos ni con Johan Madrid ni con Horacio Calcaterra pero queda la impresión que si aplicamos lo que ya se ha visto en vértigo y eficacia, podríamos tener argumentos para sumar un nuevo triunfo. Que va a ser difícil, lo va a ser. Sobre todo por el banco aliancista. Mario Salas ya mostró sus cartas y doy por descontado que Pablo Bengoechea las ha visto y estudiado. Dependiendo de cuál de los dos afronte de mejor manera táctica el reto, se verá aquel que salga sonriendo del Nacional.
Regresó el fútbol nacional, regresó Sporting Cristal con una victoria y eso es un gran motivo para alegrarse.