
(Prensa Sporting Cristal)
Copa Libertadores: Mochila pesada
por Roy Galdós Sánchez
El pitazo final de Carlos Orbe llegó y con ello las sensaciones, tras lo visto en el estadio Nemesio Camacho, no fueron las mejores. Un impotente Sporting Cristal había quedado terriblemente retratado ante el vigente monarca del fútbol colombiano, Independiente Santa Fe. Una derrota por 3 – 0 que, en el papel -y para efectos de la posición en la tabla-, dejó al conjunto cervecero al borde del «Knock-Out» de manera prematura.
En el fútbol, la palabra “retratado” puede interpretarse de muchas maneras. Contextualizándolo al partido del jueves, podría sonar un poco injusto decir que Sporting Cristal quedó así en Bogotá. Sin embargo, la Copa Libertadores, siendo un torneo –como muchos otros- que para seguir avanzando te inyecta una pizca de resultadismo, admite esta palabra independientemente del trámite del partido.
Ahora, de esta afirmación surge una pregunta que no solo involucra a Sporting Cristal y su derrota en tierras cafeteras: ¿Por qué a los equipos peruanos les cuesta tanto evitar quedar retratados a nivel internacional, si en el desarrollo del juego hay cierta tendencia favorable a estos?
Para muchos quizás la respuesta esté en el taco irresponsable de Jorge Cazulo, en los “intentos” de gol olímpico de Carlos Lobatón, en el excesivo individualismo de Gabriel Costa, en el ingreso siempre intrascendente de Cristian Ortiz, o en el fervor de José Guillermo del Solar por una idea que desde lo defensivo no tiene un sostén.
Para mí, ese tipo de afirmaciones podrían ser válidas si tuvieran un sustento que no sea el del enojo momentáneo por el resultado y que casi siempre tienen un tinte individualizador de culpas. Entender lo que pasó en Colombia amerita una posición muy cuidadosa para no caer en el círculo de las personas que solo se limitan a ver la punta del iceberg.
Sporting Cristal, como la mayoría de equipos peruanos que participan en la Copa Libertadores año a año, no solo juegan con la “misión” de clasificar a octavos de final. Ese “año a año” ha dejado de ser un tiempo de espera para convertirse en una carga. Carga que no solo está conformada por los malos resultados, sino también por el hecho de que el margen con los demás equipos sudamericanos sigue creciendo. Y eso, a la larga, termina convirtiéndose en una mochila muy pesada, que queriendo o no queriendo, nos negamos a ver de qué está llena.
El retorno de Bogotá a Lima ha sido muy duro por cómo sucedieron las cosas. Un retorno que seguramente significó tener en la espalda esa mochila aún más pesada. Y no precisamente por los tres goles recibidos.
La Copa Libertadores siempre fue una pesadilla para los equipos peruanos. Desde su creación, sólo tuvimos un lapso entre 1965-1975 en donde fuimos más o menos competitivos y luego vino aquel Cristal de los 90, entre 1993-1997 que fue el único que sacó cara por el fútbol peruano. De ahí, en general, pura vergüenza.
Los constantes fracasos tienen múltiples causas: falta de profesionalismo, baja autoestima, mala formación, poca capacidad dirigencial. Todo eso a lo largo del tiempo ha contribuido a hacer de nuestro fútbol a nivel de clubes un producto de baja calidad y por tanto de escasa competitividad.
El otro día veía el partido entre Nacional de Medellín y Barcelona de Guayaquil y los comentaristas colombianos criticaban un poco el desempeño de un jugador de Nacional, no recuerdo el nombre, diciendo que una cosa era la liga colombiana y otra cosa era la Copa Libertadores, en donde había que dar mucho más. Daban a entender que la liga colombiana era un poco «engañosa» y que era mejor que los jugadores emigraran, que la liga local no era tan competitiva. Imagínense. Y eso que Independiente Santa Fe fue campeón de la Sudamericana en el 2015 y Nacional fue campeón de la Libertadores 2016 y fácil pudo serlo de la Sudamericana 2016 si no fuera por la tragedia de Chapecoense. Eso sin contar que los clubes colombianos suelen llegar a instancias finales en los torneos en los que toman parte. Y así y todo, ellos piensan que su liga no es muy «competitiva». Si supieran…
Cristal es producto del fútbol peruano y por tanto sus calamidades lo afectan. Los títulos que conseguimos nos engañan, pero más a los dirigentes que piensan que todo se hizo bien y no corrigen lo mucho que se hizo mal.
Evidentemente no se puede soslayar el tema del dinero. Por ejemplo, para esta Copa la U Católica de Chile contrató a Diego Buonanotte, al uruguayo Santiago Silva (no el nuestro sino el pelado ex-Banfield, ex-Boca), a Enzo Kalinski campeón de la Copa con San Lorenzo, al portero de selección argentina aunque veterano Franco Constanzo, al delantero Ricardo Noir, ex-Racing. Habría que agregar los jugadores chilenos, que también están en nivel competitivo. Y aún así, contrata. Cristal no podría tener una plantilla con ese nivel, pero si quieres pensar en grande, tienes que invertir en grande. A la Católica nadie le asegura que será campeón con esos jugadores, pero al menos sabe que va a competir. Y lo está haciendo hasta ahora. Empató de visitante contra el difícil Paranaense y le ganó de local a Flamengo. Una plantilla de nivel eleva tus probabilidades.
Entiendo que los buenos jugadores no quieran venir, pero entonces ¿qué hacemos? ¿Seguiremos soñando con alguna sorpresa?
Creo que en los 90 tuvimos más agallas, lucidez, un poco más de dinero también y parecíamos enrumbados. Pero después de 1997 todo involucionó y volvimos a ser los de siempre.
Creo que los dirigentes tienen la palabra. Hay que hacer torneos atractivos y racionales. Trabajar de forma seria y profesional con las inferiores para formar atletas y no peloteros. Elevar estándares, no andar peseteando.
Es un chambón salir de esto. Estamos 30 años atrasados. Creo que Cristal lo intenta, pero da la impresión que lo hace a medias y en el camino cede a las tentaciones del sistema.
Ojalá los «veteranos» vivamos lo suficiente para ver el gran cambio y que sea Cristal el que levante esa Copa por vez primera para el Perú.
Y creo que el principal error es continuar con lo obvio. Nos costó 4 años, y 4 libertadores para darnos cuenta que no teníamos arquero para competir. No habrá sido posible descubrir eso solo en las 2 primeras libertadores (2013 y 2014)? ¿cuántas copas libertadores les hará darse cuenta que no tenemos lateral derecho? ¿cuántas copas libertadores tendrá que pasar para darnos cuenta que los centrales no son centrales?
Así es. Es sorprendente el ansia de persistir en el error. Hasta sospechoso parece.
El tema de los centrales es especialmente llamativo. Después de tantas contrataciones que fueron verdaderos fiascos, se aburrieron y empezaron a improvisar. Pero eso es culpa del mal ojo de los que intervienen en las contrataciones. Hay que afinar e insistir.
Recordemos algunas perlas desde el 2009: el paraguayo Ricardo Martínez, el colombiano Breyner «autogol» Bonilla, el argentino Matías Martínez, el uruguayo Alejandro Gonzáles. Puedo mencionar también al argentino Nicolás Ayr, que en mi opinión fue el que más cumplió de todos los nombrados.
Más atrás aparecen Fassi, Espíndola, Robert Lima. Y alguna vez Oblitas lo puso de central al «Pinza» Hernández, lo recuerdan? Puta, el colmo del hueveo ¿no? Ese ciego ya lo tomaba todo a la joda también. El Pinza era recontraperuano pero lo pongo porque es una de las mayores pastruladas en ese puesto que recuerdo.
Faltan los demás nacionales, pero bueno, acá nunca hubo de dónde elegir y nos toca entonces formar buenos centrales a nosotros, cosa en la cual también andamos en déficit. Fácil así como hay preparador de arqueros y ahora hasta de delanteros, también debería haber de centrales.
Recuerdo hace unos meses una entrevista a Oscar Ruggeri y en ella contaba que cuando él se inició, efectivamente, los centrales tenían una preparación especial. Decía que, entre otras cosas, les ponían una vara bien alta que tenía varias pelotas colgando de sogas y a todos los mandaban a saltar y cabecear una y otra vez todo el santo día. Yo recuerdo la dupla que hizo Ruggeri con el uruguayo Nelson Gutiérrez en River Plate allá a mediados de los 80. Puta, por arriba no les ganaban una, esos eran centrales, tremendos. Y por abajo imponían respeto también.
La mejor defensa, es la defensa, hermano. Eso de «el ataque», «la posesión», «la presión alta», «el volante polifuncional», suena bonito, pero al final son huevadas que no sirven si te mandan un corner y todos se mean ante el rival que arremete de cabeza. Si tienes un buen central que sepa ponerle cara de perro al rival y que va a todas, quédate tranquilo.
Es una buena pregunta ¿cuánto tiempo pasará hasta que se den cuenta que la cagan y la siguen cagando?
Al zancudo Olivares también lo pusieron de central en la copa Libertadores
Esa es la gran pregunta Gino, si buenos jugadores extranjeros no quieren venir, ¿que hacemos? Y la verdad es que razones sobran para no querer venir: alto índice de criminalidad, seguridad ciudadana ineficiente (Noctámbulo comentó que poco antes que el equipo de viajara a Ancash, delincuentes asaltaron a Blackburn), partidos que se juegan en canchas de plástico y a la 1 pm, muchas horas de viaje en bus para llegar a canchas como Sicuani, Rosas Pampa, etc.; no creo que sean cojudos para exponer su carrera deportiva con las condiciones que el Perú ofrece, a no ser que sea un tipazo como Ronaldinho, hay muy pocos con sus palmarés y su humildad. Entonces retomo la pregunta ¿qué hacemos?
Efectivamente, improvisar jugadores en puestos inadecuados es un disparate, peor aún cuando año tras año han demostrado una gran capacidad para hacer malas contrataciones de refuerzos, que en vez de potenciar al equipo lo único que hacen es estorbar y quitar oportunidad para que algún canterano vaya fogeandose.
Creo que la posesión de balón es un buen modo de defenderse, mientras más tiempo la tengas contigo menos oportunidad tendrá el rival para atacarte, pero no solo es tener el balón sino también saber qué hacer con ella, lo que el equipo ha mostrado es que una vez que recuperan la pelota se les apaga el televisor y empiezan a hacer tonterías en la cancha, y es que 3 meses de trabajo resulta muy poco si tienes un plantel de jugadores limitados y un DT sobrevalorado inexplicablemente.
Slds,
Hola a todos.
Desde una perspectiva neutral, (soy colombiano) creo que el futbol peruano se estanco, mientras que otros paises, evolucionaron. A Colombia le tomo mucho tiempo regenerar sus divisiones inferiores, tanto así que después de 3 mundiales seguidos, tuvimos ese bache y dejamos envejecer la selección sin recambio. Así que toda la estructura del futbol, tuvo que cambiar y evolucionar. Todo es todo y aún nos falta muchísimo. Ecuador también tuvo su evolución y Venezuela también, en mayor o menor medida, pero ya no son los mismos que ibas y goleabas muerto de la risa, hoy un equipo venezolano te puede eliminar.
Algo que mencionabas de Nacional en ecuador, la critica se la hacían al jugador Mateus Uribe y la critica fue, porque él es un volante por dentro y ultimamente, esta siendo improvisado como extremo por derecha (por la salida de Berrio). En el FPC ha rendido ahí, pero a nivel internacional, si se le nota que no es su puesto, se le ve incomodo.
El nivel internacional te muestra errores, porque es otro nivel.
Perú necesita urgente una re ingeniería, y no es de uno o dos años. Es desde infantiles y todo lo que implica eso: minimo 10 años de proceso y dinero, mucho dinero. No hay de otra, porque si no, esa brecha se hará aún mas y mas grande. Saludos.
Gracias por tus comentarios Alejandro, esa es la idea que compartimos muchos en este Blog, el proceso debe empezar desde las divisiones inferiores y Cristal ya empezó con el cambio con las inferiores; lo que me preocupa es que no se ve en el proceso la bisagra que articule el formativo de los canteranos con lo que se pretende en el primer equipo, llevamos 4 años de iniciado el proceso en donde se trabajó bien con las inferiores pero el primer equipo es un mal chiste gracias a las genialidades de los brillantes directivos; si no hay bases solidas en el esquema de juego del primer equipo, los canteranos promovidos no podrán explotar todo el potencial que pueden dar. Hemos completado la mitad del circulo, la otra mitad aun no define su trazo para poder cerrar el circulo. 4 años que no se avanzó al ritmo que se debió hacer, supongo que en los 6 años que faltan llegará la iluminación divina para que el primer equipo llegue a dar el salto para las competiciones internacionales.
Saludos a toda Colombia.
Ojo, yo no solo habló de un proceso de cristal. Yo habló de toda la liga, copas nacionales, torneos de ascenso, torneos provinciales y futbol amateur. Aquí en Colombia, TODOS tuvieron que cambiar. Equipos profesionales, directivas, infraestructura, periodismo y hasta hinchada.
Si solo lo hace cristal, lo único que tendrán es un muy buen equipo en un torneo muy mediocre y que cuando sale, se estrella. Todo debe cambiar, porque una golondrina no hace verano.
Salido.
Bueno amigo colombiano, para todos está claro que el fútbol peruano ha involucionado, mientras otros países fueron en la dirección contraria, y que eso se debe fundamentalmente a la falta de aparición de jugadores jóvenes, capaces de competir a nivel internacional, otra razón importante ( sin que esto necesariamente explique lo anterior) es la mala actuación dirigencia.
Hasta aquí todo el mundo de acuerdo, en lo que si no estoy de acuerdo es los remedios que se proponen para curar al enfermo, Ud habla de una reingeniería , el término es muy amplio y para los que no lo conocen equivale a una profunda reestructuración desde las bases, por supuesto que una reestructuración es necesaria cuando las cosas no funcionan, y para no ser tan amplio, me referiré al punto que Ud da como razón para el deterioro del fútbol peruano,: «las divisiones inferiores y su regeneración», para preguntarle como cree Ud que se hace eso, díganos Ud cuales son las acciones concretas que debemos tomar al respecto.
Adelantándome a su respuesta, le diré que eso de formar jóvenes futbolistas competitivos a nivel internacional, parte por el principio de seleccionar al material humano que se va a formar, si ese material no tiene el talento requerido, no habrá el resultado esperado, formará jugadores, tal vez algunos buenos jugadores, pero no talentosos jugadores, eso es lo que se ha venido haciendo últimamente. La aparición del talento pasa por la masificación del futbol, situación que se ha perdido en el Perú, no se como será en Colombia, pero aquí cada vez menos niños y jóvenes juegan fútbol, todo ello como resultado de un cambio que se ha dado en la sociedad peruana, que no voy a explicar aquí, pero se lo resumo en una frase, en lugares como El Callao y otros de donde salían en el pasado los mejores futbolistas, hoy solo ( o mejor dicho en gran parte) aparecen delincuentes , y que delincuentes .
Entonces el principal problema del fútbol, tiene sus raíces fuera del mundo del fútbol, y con los métodos tradicionales es poco lo que los dirigentes podrían hacer, y aquí es donde entra a tallar el otro factor: La dirigencia. Obviamente los dirigentes no han estado haciendo bien su tarea y es preciso que aquí, si haya una reingeniería, La FPF debe reformarse, para comenzar no puede estar a cargo de los Srs. Oviedo y Oblitas, solo como ejemplos, no puede estar exigiendo a los clubes divisiones menores hasta sub-15, para que participen en torneos que otorgan puntos a la 1ª división , a parte de injusto es un abuso, no puede obligar a clubes que con la justas tienen posibilidad de mantener a sus mediocres primeros equipos( que dan pena en la sudamericana) como para mantener divisiones menores que o le van a servir de nada, en la lugar la FF de preocuparse en primer lugar de las canchas, aquí se juega( es un decir , se juega) en canchas que dan pena, y no hablo de las licencias, que lamentablemente es un mandato FIFA, que obliga a los clubes a tener un aparato de gestión que muchos de ellos no pueden solventar.
Entonces la labor que no hace la FPF , porque no la entiende, supongo, debe ser en primer lugar coordinar con los distintos niveles de gobierno, empezando por el ministerio de educación para masificar el futbol, en segundo lugar sentar las bases para que el fútbol sea rentable, que aparezcan nuevas inversiones, tanto a nivel profesional como en divisiones de menores, aqúi varios de los clubes más importantes( todos a excepción de Cristal), fueron declarados insolvente e intervenidos, en un proceso que dura años y que lejos de mejorar la situación financiera los ha endeudado mas, y hasta ahora no se sabe como va a terminar el proceso, en todo este tiempo la FPF no ha intervenido para nada, se ha escondido, desperdiciando la ocasión de lograr que esos clubes se transformaran en sociedades anónimas y captaran nuevos inversionistas, haciéndolo fuertes y competitivos. El tema es largo y lo dejo aquí.
Si, hablar de re ingeniería es algo gigantesco. Eso paso aquí. El futbol colombiano, se estaba quedando a principios de siglo y toco cambiar todo, desde sus bases. Es dificil que los equipos pequeños hagan los cambios que hacen los grandes, pero todos los equipos grandes deben hacerlo para así halar a los demás.
Me hablas de violencia en el Callao? Esa problemática siempre la hemos tenido y deben usarla como nosotros: el deporte lo usamos para alejar a los niños de las calles, claro esta, eso debe ir de la mano con una politica nacional.
Cuando digo que cambiamos todo, es todo y aún nos falta muchísimo para mejorar el producto futbol en nuestro país. Las canchas y escenarios deportivos nos falta pero ahí estamos en el proceso, cada club ha asumido un modelo económico para sostenerse y Dimayor y FCF ha adoptado modelos exitosos en el mundo para regir. La formación en el exterior de técnicos para inferiores y profesionales o hasta el cambio en el periodismo y cambios en las hinchadas. Te diré, aquí a principios de los 2000, los promedios eran de si mucho 15mil aficionados y con rejas entre el campo y tribuna. Hoy, puedes ver el Atanasio lleno cada partido, con un gran espectaculo. Como lo dije, el futbol es un producto que consumimos, y aún nos falta mucho para ser un gran producto.
Perú lo necesita y se lo merece, deben hacerlo ya o ya, porque entre mas tiempo pase, la brecha es mas y mas grande.
Saludos.