La Cancha: FBC Melgar 1 – Sporting Cristal 1

Este punto logrado en Arequipa hay que sopesarlo bien.

¿Por qué?

Porque Arequipa es un sitio que usualmente nos es hostil. Son pocas las veces que Sporting Cristal trajo resultados buenos de Arequipa e incluso grandes equipos cerveceros terminaron perdiendo puntos ahí.

Por eso es que, cada punto que un equipo bajopontino logra en Arequipa debe ser bienvenido.

Pero, ¿saben una cosa?

El juego de Cristal no me termina de gustar.

Y no sé como ser justo con lo que veo. Lo digo por que se nota que el equipo tiene una estructura, tiene una idea de juego, un orden establecido. Pero a la vez es  un equipo ineficiente. Ineficiente por que no es ofensivo. Ineficiente por que no genera jugadas de ataque claras. Ineficiente por que no sabe traducir en números la superioridad que suele mostrar en la cancha.

Entonces, yo podría sentarme y decir “este equipo juega bien y los goles serán cuestión de tiempo”. Pero no. Por que puedo aplaudir el buen trabajo táctico del equipo pero no puedo quedarme tranquilo viendo como San Martín nos saca tanto puntaje y viendo cómo – siendo alguna vez punteros – ahora estamos cuartos.

Por que reniego cada vez que Fernández lanza un pelotazo indignante con la intención de hacer un pase de ataque. Por que me desespera la monotonía en el juego de Advíncula que sólo juega a sacar centros que nunca llegan a su objetivo. Por que siento que desperdiciamos al mejor delantero del campeonato pidiendole que se limite a cabecear pelotazos impresentables.

El gol arequipeño fue un remate de tiro libre en el que poco hay para reprochar. El problema no fue ese. El problema fue que Cristal, en realidad, no pasó tantos apuros. Incluso podría decir que se las arregló para dominar el partido. Muestra de eso que decimos es que el gol cervecero llegó de penal. Un defensor desesperado que pateó a Villarreal y el Chino Ximénez que luego de cuatro partidos tiene una opción de gol y la metió.

También que, si no era de penal, creo que Cristal no habría logrado anotar.

Ahora, los rivales que enfrentan a los cerveceros creo que podrían evaluar jugar sin defensas. Este equipo parece no poder hacerle un gol a nadie.

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