La Cancha: Alianza Atlético 0 – Sporting Cristal 2
No habría sido la primera vez.
Ya antes el equipo venía bien y, luego del receso por las eliminatorias, se olvidaba de jugar y todo lo avanzado se perdía.
Entonces, disculpame camiseta celeste, algún miedo había.
El partido empezó dentro de lo previsible. Cristal se mostró un poco lento y previsible y por eso es que Alianza Atlético tuvo un mejor dominio del balón y las oportunidades más claras de gol salvo un cabezazo de Villalta que fue anulado por el árbitro. Dicen que fue posición adelantada aunque, vistas las repeticiones, no lo llego a ver bien.
Sin embargo, no se veía tan lejos la posibilidad de llevarnos nuevamente los tres puntos de Sullana. Hace tiempo que esa ciudad ha dejado de ser hostil y, más bien, se torna muy generosa cuando la celeste llega de visita.
El segundo tiempo marcó el debut de Jiménez con Cristal y también marco el tiempo en que Cristal tomó el control del partido. Alianza Atlético no podía dar para más, por otro lado. Jiménez cumplió la función que se esperaba, aumentarl el volumen ofensivo y tener preocupada a la defensa contraria. Al marcar a Malingas, Hurtado y Chorri tuvieron más espacios y ahí si, Cristal hizo lo suyo.
Un buen pase largo de Lobatón dio lugar a que Hurtado haga lo que sabe, entra por izquierda, para la pelota – como sea, dicho de paso – y define. La pelota rozó al arquero y entró mansita, despacito, como pidiendo permiso. Gol y tranquilidad. El mismo Tanque generó el segundo. Desborde por izquierda, siempre por izquierda, y centro a ningún lado. No había ningún cervecero en el área pero la defensa del local estaba tan mal parada que el Chorri, viniendo desde lejos, logró alcanzar el balón y, aunque podía rematar al arco o ceder a Jiménez que ya estaba frente al arco aunque rodeado de defensas, cedió más atrás para que Edwin Pérez remate con fuerza y anote su primer gol en Cristal.
Alegrías, abrazos, alivio ante la victoria sobre Alianza Atlético pero, sobre todo, victoria ante nuestros propios fantasmas. Por que, seámos sinceros, el miedo no lo metía el local sino el mismo rendimiento que Cristal pudiera tener.
Oblitas lo dijo. Y dijo bien, a mi parecer. Oblitas dijo que el rival de Cristal, hoy por hoy, es Cristal mismo. Y contra esas limitaciones, contra esos fantasmas, hemos ganado ayer. Por eso nos alegramos e incluso nos permitimos soñar. Como sueña el Patrón González al declarar que este equipo puede llegar a ser campeón.
Por lo pronto ya volvimos a la primera mitad de la tabla, a sólo seis puntos del puntero y con varios partidos por delante.
Uno piensa en lo que ve y recuerda que la frase «Cristal campeón» suena muy bonito. Pero vamos poco a poco.
Bueno, se ganó y otra vés contentos por el triunfo y los puntos. Pero nada más. ¿cuanto tiempo durará esa situación?. Yo pregunto ¿que hubiera pasado si Sullana convierte uno o dos goles en el primer tiempo, en que tubo varias oportunidades claras?. Hoy seguramente estaríamos consolandonos con el empate o lamentando la derrota. Así no pues. No hay contundencia. No hay la seguridad de que se va a jugar bien y por lo tanto de que vendrán los buenos resultados. Debe cambiarse de dirección tecnica y traer refuerzos buenos. A Malingas todavía no se le vé jugar completo. Pero ni aún así jugara muy bien, alcanzaría para tener una buena delantera o equipo. No nos engañemos. Con un equipo así estaremos a lo más buscando seguramente jugar la Copa que disputan los cuartos y quintos lugares.